Deconstruir lo conocido: una experiencia somática
Todo el tiempo estamos cambiando, y esos cambios nos construyen nuevos modos de ser, nuevas posibilidades. Al estar presentes en ese proceso, el vínculo con nosotros mismos y con lo que nos rodea se transforma, lo que puede generar una relación más armónica y disfrutable.
A veces, lo imperceptible parece carecer de importancia; sin embargo, la verdadera escucha comienza en el silencio, en el vacío intermitente del pensamiento, en la paciencia de la nada.
“Conocer la propia respiración es una brújula que convierte al vagabundo en peregrino”.
Antiguo Proverbio Ruso.
Elige las clases que estés necesitando para hacer en este momento
1. Una pausa para descansar y evitar el insomnio:
En cuatro clases podrás incorporar herramientas y ejercicios que te servirán de mucha ayuda para poder soltar las tensiones del día y reponer tus energías. Un cuerpo descansado le da más libertad a la mente.
2. Tensión en el cuello y la mandíbula
Percibirnos en movimiento nos permite modificar malos hábitos y así evitar el desgaste físico, el estrés, la fatiga y la tensión.
3. Mi equilibrio: ¨El apoyo de la planta de los pies¨
Mover, aprender, analizar y jugar con el apoyo de las plantas de los pies nos facilita diferenciar e integrar las distintas partes de nuestro cuerpo. Ampliar sus conexiones, mejorar nuestro equilibrio. Es un medio para apropiarnos de nuestras habilidades y creatividad.
4. Una columna feliz es una cintura sin dolor
Al moverse con el mínimo esfuerzo y observar las relaciones en las diferentes partes del cuerpo, llevando la atención hacia lo que sucede mientras se mueve, la persona aprende sobre sí misma.
5. Elige tu clase
Generar un espacio de investigación personal, de búsqueda, de autoconocimiento, en donde cada persona pueda encontrar sus propios recursos y herramientas, su autenticidad, en servicio de su vida, de su cotidiano, de un instante…
6. Cómo sentir alivio, comodidad, placer en pocos minutos
El tener un cuerpo consciente, organizado y atento, nos habilita a comprender con mayor claridad, las funciones básicas del movimiento humano. Y de ese modo poder incorporarlas a las prácticas cotidianas.